En nuestro blog hemos hablado de bastantes de los principios activos que conforman la cosmética moderna, como la archiconocida vitamina A o la menos popular melatonina. Y, sin embargo, ambas son esperables y nada sorprendentes en la etiqueta de una crema hidratante. Algo que no ocurre con el cannabidiol, también conocido comercialmente como CBD, un derivado de la planta del cannabis. Este principio activo todavía es desconocido por muchos de los consumidores de cosméticos. Por eso vamos a contártelo todo.
Cosmética cannabidiol
La primera pregunta es obvia: ¿cómo es posible que una sustancia extraída del cannabis sea de uso legal en la formulación de cosméticos? La respuesta la encontramos en la procedencia de este cannabis. Mientras las sumidades, floridas o con fruto, de la planta del cannabis son consideradas sustancias estupefacientes, todo elemento obtenido de las semillas o de las hojas no unidas a las sumidades floridas de la panta son legales y, por lo tanto, pueden emplearse para diseñar y fabricar cosmética con cannabidiol.
CBD cosmetic
En concreto, y de todos los elementos que componen esas hojas no unidas a las sumidades floridas, el CBD es un cannabinoide sin efectos psicotrópicos. Es, junto con el tetracannabidiol o THC, el principio activo más abundante de la planta del cannabis, pero este último sí proporciona efectos psicoactivos. En resumen el CBD no posee propiedades de alteración de la conciencia, lo que unido a sus increíbles propiedades para la piel y la salud en general, están convirtiendo la creación de cosmética CBD en una constante.
Cosmetics que utilizan cannabidiol
De hecho, en la actualidad existen infinidad de productos cosméticos con cannabidiol, además de productos de higiene personal como geles de la piel, champús o acondicionadores. Tan pronto como los laboratorios y las marcas fabricantes han descubierto los beneficios de la CBD cosmetic, tal y como se la conoce en la rama anglosajona de la innovación cosmética, las estantería de las tiendas especializadas se han colmado de estos fórmulas. Y en Glacée, marca de vanguardia en I+D, no podíamos ser menos.
Industria cosmética CBD
En concreto, en Glacée hemos desarrollado una mascarilla hidratante llamada CBD Sleeping Mask. Gracias a su contenido en cannabidiol, en conjunción con otros ingredientes como melatonina, niacinamida, aceite de jojoba, aceite de chía o extracto de Chondrus crispus, esta fórmula de cosmética CBD proporciona reactivar el mecanismo celular, hidratar la piel y aportarle tanto suavidad como brillo. El CBD puede hacer mucho por la salud y la estética de las pieles. Solo necesitábamos dar con la fórmula perfecta.
Para qué sirve la cosmética CBD
El cannabidiol extraído del cannabis, más específicamente de la variante herp sin efectos psicotrópicos, está pisando fuerte por derecho propio. Al fin y al cabo, entre sus virtudes, se encuentran su capacidad nutritiva, la capacidad hidratante, la capacidades relajante y la capacidad calmante. Además, la osmótica CBD también puede aportarnos una excelente defensa antioxidante gracias a su riqueza en vitamina E y ácido fenólico. Es un aliado fantástico contra los radicales libres que provocan el envejecimiento dérmico.
Cómo utilizar la cosmética con cannabidiol
La correcta utilización de la cosmética cannabidiol depende del producto concreto. En cuanto a nuestra CBD Sleeping Mask, la consigna está clara: extender una generosa capa del producto sobre la cara limpia y seca y evitando el contorno de los ojos. Cuando confirmemos que ha sido debidamente absorbida, podremos irnos a la cama y dejar que el CBD y el resto de ingredientes hagan su magia durante toda la noche. Basta con usar nuestra propuesta de cosmética CBD entre una y tres veces por semana para disfrutar de los resultados.